Un niño indocumentado, de aproximadamente 08 años de edad, que sufre de sordera y tiene dificultades para hablar, que había sido arrojado de un taxi en marcha, según testigos, ha sido auxiliado por agentes de Seguridad Ciudadana de Trujillo, quienes lo han trasladado en un patrullero edil y lo han puesto a disposición de la Policía Nacional de la Comisaría de la Familia, donde primero se han negado a recibirlo, pero después, gracias a la intervención de un fiscal del Ministerio Público, lo han admitido, previa suscripción de un acta policial de recepción de menor. La intervención se ha producido sobre las cinco de la tarde de este martes, en la segunda cuadra de la avenida Perú, por las inmediaciones del grifo Gaspetrol y el mercado Unión, en la jurisdicción de la urbanización El Molino, según da cuenta un informe dirigido al gerente de Seguridad Ciudadana y Defensa Civil de la Municipalidad Provincial de Trujillo, David Figueroa Armas. En el documento, los agentes explican que cuando efectuaban el servicio de vigilancia preventiva por la zona dos de la ciudad, a bordo de una motocicleta de Seguridad Ciudadana de Trujillo, observaron a un menor que caminaba de manera sospechosa por el lugar, por lo que procedieron a intervenir. Agregan que el niño no ha podido responder a las preguntas efectuadas, constatando que se trataba de una persona que sufre de sordera y tiene dificultades para hablar, por lo que comenzaron a indagar en la zona por sus familiares, sin resultado favorable.
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